Darkness in El Dorado Controversy - Archived Document


Internet Source: El Nacional, October 1, 2000
Source URL (Archive.org): http://www.el-nacional.com/archive/result.asp?file=/archivedata/2000/10/01/pc2s3.htm&rest=Tierney

Yanomami fueron usados como cobayas humanos por científicos de EE UU

NUEVA YORK/EFE

Un libro sobre un experimento científico sospechoso de haber propiciado una epidemia mortífera entre los indios yanomami ha generado polémica antes incluso de que la editorial lo ponga en venta, con la promesa de "sacudir los cimientos de la antropología".

La obra, Darkness in El Dorado (Oscuridad en El Dorado), lleva un subtítulo más explícito: "How scientists and journalists devastated the Amazon" (Cómo los científicos y los periodistas devastaron el Amazonas), pese a lo cual su autor es, precisamente, un periodista, Patrick Tierney.

El origen del libro se remonta a 1968 y sus protagonistas son un equipo científico encargado de un estudio con los yanomami, etnia indígena de la cuenca del Amazonas, en el Sur de Venezuela y el Norte de Brasil, que casi no tuvo contacto con el resto del mundo hasta la década de los años 50.

El director del estudio, que apoyaba la antigua Comisión para la Energía Atómica, fue James Neel, un especialista en genética humana fallecido en febrero pasado, que trabajó en la Universidad de Michigan y fue miembro de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.

El libro, del que se publicarán unos fragmentos la semana próxima en la revista New Yorker, presenta supuestamente pruebas de que los yanomami fueron inoculados con una vacuna contra el sarampión denominada Edmonston B.

Aunque sin llegar a una conclusión determinante, el autor sugiere que el experimento pudo contribuir a propagar una epidemia que causó cientos o miles de muertes entre una población de cerca de 20.000 yanomami.

La hipótesis es que la vacuna en realidad propagó el sarampión entre personas que nunca estuvieron expuestas a él y que el equipo de investigación abandonó a algunos enfermos sin tratamiento.

Calificada como "caza de brujas" por unos científicos y considerada por otros cuestionable en la interpretación de los datos, la obra preocupa, ya antes de su publicación, por las sospechas sobre ética profesional que puede suscitar y su repercusión sobre futuros programas de vacunación.

Su pronóstico no parece descaminado, a juzgar por las primeras reacciones de varios científicos, entre ellos Napoleón Chagnon, antropólogo de la Universidad de California, en Santa Bárbara, que participó en el proyecto. Chagnon, en unas declaraciones al diario The New York Times, negó las acusaciones, que considera una "larga venganza contra mí" por parte de algunos críticos.